¿Qué es el bruxismo?

El bruxismo es un movimiento inconsciente de nuestra mandíbula, es decir, presionamos la dentadura o rechinamos los dientes sin darnos cuenta.

Aunque puede darse tanto de día como de noche, es habitual que se dé durante las horas de sueño. Y por ello, tardamos más en percibir que padecemos esta dolencia.

El bruxismo puede aparecer y desaparecer en cualquier momento de la vida, pero la edad más frecuente de iniciación está entre los 17 y 20 años. Y la edad más frecuente de remisión de la patología son los 40 años.

Estas cifras no son de extrañar si tenemos en cuenta que uno de los factores desencadenantes es el estrés.

Tipos de bruxismo

Según la forma de mover la dentadura, el bruxismo puede ser de dos tipos:

  • Céntrico (apretar los dientes). Este tipo daña el cuello de los dientes y provoca dolores de cabeza causados por la tensión.
  • Excéntrico (rechinar los dientes). Este tipo daña el borde incisal y oclusal de los dientes. Los movimientos de la mandíbula siguen siempre el mismo recorrido, lo que da como resultado un desgaste de estas zonas. Este tipo afecta mayormente a los incisivos.

Ambos tipos de bruxismo pueden padecerse de forma simultánea.

Consecuencias

La presión de los dientes puede dar lugar a numerosas consecuencias como dolor de los músculos de la mandíbula, dolor de cuello, dolor de oído y fuertes dolores de cabeza.

Además de las consecuencias que hemos visto y que percibes al momento, a largo plazo también tiene efectos. La presión y el rechinamiento desgatan los dientes de forma prematura.

Cómo identificarlo

La identificación del bruxismo es una tarea difícil. Aunque los síntomas son los dolores de cara, cuello o cabeza, no solemos asociarlos al bruxismo.

Normalmente, se diagnóstica durante las revisiones dentales rutinarias, ya que los dentistas perciben el desgaste de la dentadura.

En otras ocasiones es nuestro entorno quien lo descubre al detectar el ruido del rechinar de los dientes mientras dormimos.

En cualquier caso, si tienes alguna duda visita a tu médico/dentista. Ellos te ayudarán a diagnosticar el problema.

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