En el artículo anterior os hablamos de las causas y síntomas que propician la aparición de ojos secos y cansados. Pero el uso cada vez más habitual del aire acondicionado ha hecho que el foco de atención se detenga en los meses de verano, en los que intervienen otros factores como los baños en piscinas y playas. En Farmacia Lizandra te explicamos cómo cuidar tus ojos en los meses más calurosos.
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No te frotes los ojos
Aunque te piquen los ojos, no te los frotes. Puedes hacerte una herida y, si tienes las manos sucias, generarte una infección. Además, aunque no lo parezca, en lugar de aliviar el picor, lo incrementa y te pone los ojos más rojos, aumentando las molestias.
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Controla el uso del aire acondicionado
El sistema de refrigeración que tanto nos alivia ante las olas de calor favorece la evaporación de las lágrimas y, por tanto, aumenta la aparición del ojo seco. Mantén la temperatura del aire acondicionado entre 21 y 26 grados.
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Evita el uso excesivo y prolongado de los dispositivos electrónicos
Centrar la vista en un punto fijo provoca el cansancio y la sequedad en los ojos. Para evitarlo intenta forzar el parpadeo, especialmente cuando estamos utilizando el ordenador o el móvil.
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Protégete de la polución ambiental
EL viento, el polvo doméstico, el humo del tabaco o los disolventes también generan algunos síntomas como la arenilla y el ojo seco. Intenta evitar los lugares con contaminación ambiental.
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Toma precauciones al tomar el sol
Toma el sol con los ojos cerrados, incluso con las gafas puestas. Y si llevas lentillas, no tomes el sol con las lentes de contacto puestas.
En el caso de las gafas, tienen que tener filtros protectores homologados que bloqueen el 100% de los rayos UV.
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Cuidado con las piscinas y en la playa. Usa gafas de buceo
El cloro del agua de las piscinas y las bacterias irritan la conjuntiva del ojo, dando lugar a queratoconjuntivitis, conjuntivitis bacteriana e incluso algunas formas graves de queratitis.
En la playa, también es importante que uses gafas de buceo para proteger tus ojos de la sal marina y de las bacterias u hongos que pueden estar presentes en el agua.
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Utiliza colirios y lágrimas artificiales
Por último, utiliza colirios y lágrimas artificiales de manera habitual para evitar la sequedad ocular que producen las altas temperaturas.
Por lo general, la sequedad y el cansancio en los ojos son una dolencia bastante molesta pero no grave y con un buen tratamiento se pueden paliar los síntomas.