Se ha acabado el verano y has visto cómo han aparecido manchas en la piel. Lo más probable es que se hayan formado debido a una excesiva exposición al sol.
Hay diferentes tipos de manchas en la piel y cada una de ellas ha de ser tratada de una determinada manera.
Lo que ha ocurrido es que tienes un exceso de melanina. Es la misma sustancia que hace que la piel se ponga morena cuando tomas el sol.
Pueden aparecer manchas en la piel por otros muchos motivos como por ejemplo por factores genéticos. Pero en este post nos vamos a centrar en las que tienen su origen en el sol.
Manchas en la piel provocadas por el sol
Efélides o pecas
Que se dan habitualmente en personas con piel clara, en rubias y pelirrojas. Cuando la piel se expone al sol aumentan en número. Este tipo de manchas suelen desaparecer a medida que avanza el otoño y el invierno y, por tanto, no requieren habitualmente de un tratamiento.
Lunares o nevus
Además de estar relacionadas con el sol tienen un componente genético y pueden ir apareciendo sin necesidad de ser provocadas por la radiación solar. Es necesario revisarlas de forma periódica y visitar a un dermatólogo. Las personas que las padecen necesitan de una fotoprotección adecuada y en ningún caso utilizar tratamientos despigmentantes.
Léntigos solares
Son provocadas por el sol, pero su presencia aumenta a medida que nos vamos haciendo mayores. Suelen aparecer en cuero cabelludo, escote, cara y manos. Son manchas en la piel redondas. En general son benignas y en contados casos se vuelven malignas. Para eliminarlas sí se pueden utilizar despigmentantes tópicos. También es necesaria una crema protectora que contenga antioxidantes.
Pigmentación post inflamatoria
Aparecen después de una inflamación de la piel que puede ser provocada por alguna alergia o incluso por el acné. Hay que utilizar una crema protectora adecuada que debería ser recomendada por el dermatólogo. Lo cierto es que son las más complicadas de eliminar. De ahí que acudir a un especialista es lo más conveniente.
Melasma
La exposición solar es una de sus causas, si bien es cierto que las encontramos también como consecuencia de alternaciones hormonales. Muy comunes en embarazos y relacionadas también con tratamientos anticonceptivos. Este tipo de manchas en la piel suelen aparecer en la cara.
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