Si a la pregunta de si alguna vez te has quedado con la espalda clavada, tu respuesta es sí, no nos sorprende demasiado. Pues lo cierto es que la lumbalgia es la mayor causa de discapacidad en todo el mundo, por encima de cualquier otra enfermedad. Hoy en Farmacia Lizandra te daremos unas pequeñas recomendaciones para evitar la lumbalgia. Si has respondido sí a la pregunta anterior, este blog te interesa. ¡Léenos!
¿Qué es lumbalgia?
Hablar de lumbalgia es hablar de un dolor en la zona baja de la espalda, o región lumbar, entre el límite inferior de las costillas y la zona glútea, que resulta muy limitante para el desempeño de las actividades cotidianas.
Su origen está asociado a las estructuras músculo-esqueléticas, es decir, a músculos, tendones y ligamentos, y en ocasiones puede afectar a las piernas.
Por qué aparece
Un 85 % de la población que ha sufrido un fuerte dolor lumbar, tiene un alto riesgo de volver a padecerlo. Es por eso que uno de los objetivos marcados sea evitar posibles recaídas, hecho que se suele conseguir con ejercicios. Para saber qué ejercicios nos pueden ayudar, es bueno saber por qué nos quedamos “clavados”.
Así bien, la lumbalgia puede estar provocada por motivos muy variados:
- Estar por encima de tu peso.
- Una caída.
- Levantar/cargar peso, la sobrecarga.
- Trabajar muchas horas de pie o sentado.
- Un gran sobreesfuerzo o muchos esfuerzos sumados en el tiempo.
- Vivir una situación de estrés
- Una mala postura mantenida por mucho tiempo.
- Agacharse doblando la espalda, en lugar de flexionar las piernas.
Existen causas de la lumbalgia de origen mecánico, como la esclerosis, los problemas degenerativos de disco invertebral y/o de las articulaciones posteriores vertebrales, o las fracturas por osteoporosis o traumatismos violentos.
Este dolor puede presentarse de manera repentina y puede durar desde una semana hasta tres meses, conociéndose como lumbalgia aguda; o alargarse en el tiempo, conociéndose entonces como lumbalgia crónica.
Recomendaciones
Para prevenir la lumbalgia, es necesario mantener toda la estructura de la espalda fuerte y evitar malas posturas. La Sociedad Española de Reumatología elaboró un Decálogo con recomendaciones útiles para los afectados con lumbalgia:
- Mantener un adecuado peso corporal para evitar una sobrecara en estructuras vertebrales.
- Prestar atención al colchón.
- Aprender cuidados posturales correctos: sentarse de manera correcta, no alzar objetos pesados, recoger objetos del suelo doblando las rodillas, utilizar escaleras para retirar objetos de cierta altura, etc.
- Usar calzado adecuado: no utilizar tacones altos y prestar atención a posibles alteraciones en los pies.
- Dejar de fumar: el tabaco provoca hipoxia crónica además de aumentar el Riesco de osteoporosis.
- Evitar situaciones que originen estrés o ansiedad: para evitar la tensión muscular.
- Realizar ejercicio: para reforzar la musculatura lumbar y abdominal.
- Fisioterapia: para reducir el dolor con sus técnicas e identificar los malos hábitos del entorno cotidiano.
- Psicoterapia y/o Terapia Cognitivo Conductual, en determinadas ocasiones: especialmente cuando el dolor sea de larga duración.
- Evitar el reposo.
Aun sabiendo estas pocas recomendaciones, se recomienda una valoración individualizada por un profesional médico para que realice un test de movilidad y recomendarnos los ejercicios que más se adecuen a nuestro caso. Aun así, ahora ya conoces un poquito más sobre este dolor en la espalda, aunque si tienes alguna duda puedes contactar con nosotros. ¡Estaremos encantados de ayudarte!